Me han escayolado, ¿debería descansar?

¿Cómo puede afectar a mi cuerpo una inmovilización? ¿Hay alguna forma de evitarlo o prevenirlo? ¿Puedo favorecer mi recuperación durante una inmovilización?

¿Sabías que una inmovilización prolongada puede repercutir negativamente en tu salud? Llevar una escayola, guardar reposo en cama durante una ciática o durante un proceso gripal, puede hacer que nuestra salud empeore.

Una inmovilización prolongada afecta de manera negativa a nuestro cuerpo, pues provoca atrofia de la musculatura y entorpece el retorno venoso, ya que este se activa por la contracción de la musculatura cuando andamos o hacemos algún tipo de actividad física.

Para evitar las situaciones anteriores, sería conveniente, en el caso de llevar cualquier tipo de férula, hacer ejercicios de activación de la musculatura. Eso sí, siempre con una valoración previa que adapte el ejercicio a nuestra lesión. Además, podemos trabajar la fuerza en la zona del core o en otras partes del cuerpo. De esta forma, activando el sistema cardiovascular, favorecemos el retorno venoso y, con ello, la eliminación de sustancias de desecho y la llegada de nuevos nutrientes que ayudan al proceso cicatricial.

No seguir estas pautas podría provocar que nuestro proceso de recuperación sea más prolongado. En Clínica Luis Baños contamos con la tecnología que puede ayudar a que tu proceso de recuperación sea más breve:

• Super Inductive System (SIS): una tecnología basada en campos electromagnéticos de alta intensidad que estimulan la musculatura y previenen la atrofia.
• Redcord: un método de entrenamiento en suspensión que trabaja con el peso del cuerpo; en él se trabaja la musculatura profunda y el patrón de movimiento correcto.
• Vibra-Plus: un sistema de ondas mecano-sonoras que permiten acelerar la recuperación funcional al tiempo que mejoran: la propiocepción, el tono muscular, la resistencia física y la coordinación muscular.

Por otro lado, también podemos ayudar a nuestro cuerpo durante un proceso de recuperación a través de la nutrición ya que, dependiendo de la fase de recuperación en la que estemos, nuestro cuerpo necesita unos nutrientes antes que otros. Además, debemos considerar que hay otros nutrientes que entorpecen el proceso regenerativo y que, por tanto, deberemos tratar de evitar.

Así, en la fase de inmovilización, los nutrientes que recomendamos son los siguientes:

• Zinc (lo podemos encontrar en los moluscos).
• Magnesio.
• Cúrcuma.
• Té verde.
• Omega 3 (muy presente en el pescado azul).

Deseamos que estos consejos te ayuden a recuperarte lo antes posible, ya que como acabamos de ver, sí se puede trabajar y ayudar a reducir el tiempo de recuperación durante una inmovilización.