5 Consejos para el Cuidado Del Bebé en Verano

En nuestra clínica de fisioterapia y osteopatía ubicada en Jaén, podrás recuperar tu calidad de vida ¡te esperamos!

Cuidado del bebé en verano

Los bebés son especialmente susceptibles a sufrir golpes de calor, por lo que debemos prestarles especial atención y cuidado para mantenerlos seguros y confortables. Os dejamos 5 consejos para el cuidado del bebé en verano:

Temperatura agradable

Aunque sabemos que, cuando el calor aprieta, es una tarea complicada, procura mantener una temperatura agradable en el ambiente.

Evita que la habitación donde se encuentre tu bebé esté demasiado caliente y utiliza medios como ventiladores o aire acondicionado para mantener una temperatura adecuada. No obstante, es importante evitar corrientes de aire directas sobre el bebé y asegurarse de que no esté expuesto a la luz solar directa. Debemos ser cuidadosos y evitar someter al bebé a cambios bruscos de temperatura, ya que esto puede afectar a su salud.

Al tomar estas precauciones, aseguramos que nuestro pequeño esté protegido y pueda disfrutar de un verano tranquilo y seguro.

Vestimenta adecuada

Para los días de verano es importante que en el cuidado del bebé prestemos mucha atención a la ropa.

• Opta por ropita ligera y transpirable, como el suave algodón, para mantenerlo fresco en los días calurosos.
• Evita prendas pesadas o sintéticas que puedan hacer que sude más.
• Cuando salgan al aire libre, no olvides protegerlo con sombreros y crema solar para que su delicada piel esté a salvo del sol.

Hidratación para el cuidado del bebé

La hidratación es clave para mantener al bebé seguro y a gusto. Durante los días calurosos, asegúrate de mantenerlo bien hidratado en todo momento. Si le das pecho, ofrécele más tomas para que se mantenga fresquito y satisfecho. Si ya ha comenzado con alimentos sólidos, puedes ofrecerle agua fresca en pequeñas cantidades, especialmente cuando el calor apriete. Asimismo, la fruta es un alimento muy recomendable para los días calurosos de verano ya que, además de ser deliciosa y nutritiva, tienen un alto contenido de agua, lo que las convierte en una opción refrescante y saludable para mantener la hidratación de tu pequeño.

Baños refrescantes

Un baño tibio o fresco puede ser muy reconfortante para tu pequeño y ayudar a regular su temperatura corporal. Asegúrate de que la temperatura del agua sea agradable y evita que esté demasiado fría para evitar incomodidades.

Si planeas bañarlo en la piscina, la supervisión constante es esencial para garantizar su seguridad. Una vez que terminen de jugar en el agua, sécalo cuidadosamente con una toalla suave y absorbente para evitar que quede húmedo, ya que esto podría provocar un cambio brusco de temperatura.

Evita el calor

Evita salir con tu pequeño en las horas de mayor intensidad solar, que suelen ser entre las 11 de la mañana y las 6 de la tarde, cuando el sol está en su punto más alto. Es mejor optar por actividades al aire libre en las primeras horas de la mañana o en la tarde, cuando la temperatura es más suave. Si necesitas salir durante las horas de mayor calor, busca lugares con sombra para resguardar a tu bebé del sol directo. Lleva contigo una sombrilla o un pañuelo para crear una zona de sombra donde puedas protegerlo del calor y evitar que se exponga demasiado al sol.

Recordad nunca dejar a un niño solo en un vehículo estacionado, ya que la temperatura dentro del coche puede aumentar rápidamente y ser peligrosa. Por último, presta atención a señales como piel enrojecida, sudoración excesiva, somnolencia o irritabilidad, ya que podrían indicar que el niño está sufriendo un golpe de calor.

Esto ha sido todo sobre los consejos para el cuidado del bebé en verano, esperamos que os sirva de ayuda y sepáis cómo actuar en estos días tan calurosos. Os recordamos echarle un vistazo a nuestro servicio de osteopatía pediátrica.