El cambio de vida de María José

Me llamo Mº Jose Olmo Lara, tengo 46 años, estoy casada y tengo tres hijos, va ya para 4 años que empezó mi problema, bueno mejor dicho me crearon mi problema. El 17 de junio de 2010 acudí a la clínica dental para la extracción de la muela del juicio, la intervención fue poco más que una carnicería (desde aquel día tengo pánico a los asientos de estos especialistas), la doctora viendo que la cosa se complicaba llamo a otro especialista y entre los dos consiguieron extraerla, trocito a trocito, no sin antes romperme la muela de la lado, que tres meses más tarde tuvieron que extraerme (otro especialista). Como resultado de esta intervención perdí la sensibilidad total de media boca, el derrame me llego a la garganta y tras unos días los dolores eran insoportables, según ellos todo esto era normal, así pasaron tres meses, ya no volví a la clínica nunca más.

Mis secuelas eran lengua dormida sin sensibilidad, el simple roce con el labio eran como descargas eléctricas, no podía comer, se me caía la baba, la mitad de mi boca era dolor puro y duro e incluso me costaba hablar.

Después de pasar por neurólogos, cirujanos, neurocirujanos, unidades del dolor sin éxito, toqué fondo mi vida era del sofá a la cama, sin dolor claro, durmiendo no me duele nada.

Ante esto decidí vivir, con dolor pero vivir, volví a ser madre y esto me ha ayudado a seguir, me resigne a vivir así, convivir día a día con el dolor, renunciar a muchas cosas, como besar, comer fuera de casa, hablar mucho… y siempre pendiente y asustada de que nadie me tocara la cara.

Un día fui a la clínica Luis Baños con mi hijo mayor lesionado en el fútbol, en una de sus sesiones, estando en la sala de espera leí trigémino en el mural que hay allí con las especialidades de la clínica, pregunte por el tema y me dieron una cita con Luis Baños. En la primera cita le conté lo que me pasó, enseguida se puso a funcionar, la sesión fue muy dolorosa, pero lo que más destaco de ese día fue su energía positiva, que me trasmitió, salí de allí contenta, hacía mucho tiempo que me di por vencida, pero ese día comenzó de nuevo mi ilusión por recuperarme (sesión tras sesión he ido ganando camino al dolor). En una de las sesiones Luis me ofreció probar el Physicalm, algo que va por ondas y funciona muy bien frente al dolor. Me fue bien, alivio algo el dolor, en este punto conocí a Noelia, una gran profesional, se interesó mucho por mi caso, lo estudio y se informó de cómo avanzar más conmigo, lo consiguió. Luis y Noelia me ofrecieron hacer un estudio con Physicalm, y esto es lo mejor que me ha pasado en mucho tiempo, desde febrero al día de hoy he recuperado la sensibilidad total de la lengua, el dolor se ha reducido mucho, la presión en las encías ha bajado considerablemente y en general he mejorado lo inimaginable para mí. Avanzo día a día y estoy muy esperanzada en conseguirlo.

En todo este camino quiero agradecer de todo corazón a Luis y Noelia su interés, su profesionalidad y sobretodo su tacto hacia a mí, en todo este camino me han tratado muchos especialistas y lo han hecho como un caso, vosotros me habéis tratado como una persona y me habéis dado lo que ninguno, luz al final del camino.

Luis me ha enseñado que aunque la cabeza puede llegar a ser muy poderosa e incluso puede llegar anular todo tu cuerpo, tu puedes salir de ese círculo con positividad, ánimo y tirar para adelante, esto solo te lo pueden trasmitir personas como él, que viven por y para su trabajo.

Noelia es toda actividad, se vuelca en cuerpo y alma a sus casos, espero que no cambies nunca, da gusto ponerse en tus manos.

Bueno también quiero destacar el gran equipo que hay en esta clínica, todos en general, a los que conozco y a los que no, GRACIAS por vuestro respeto y trato.